08/07/2021
A través de una carta enviada por las seis interprofesionales cárnicas de nuestro país, el sector ganadero ha querido manifestar su desacuerdo ante la campaña suscrita por Alberto Garzon y el Ministerio del que es titular, en la cual difama al conjunto del sector ganadero-cárnico.
En ella, el sector también muestra su preocupación ante un ministro del Gobierno de España que enarbola una serie de afirmaciones erróneas o desenfocadas, y que lo hace además a través de canales públicos, tratando de crear una confrontación artificial con un sector, el ganadero-cárnico, que cumple un rol social y económico de primera magnitud en nuestro país. Según la FAO, este sector genera en España más de 2,5 millones de empleos y casi 9.000 millones de euros de exportaciones a la balanza comercial de España.
- España es el país más saludable del mundo (según el ranking de Bloomberg, Healthiest Country Index).
- España es el país con mayor esperanza de vida del mundo (según el IHME de la Universidad de Washington y la prestigiosa revista científica The Lancet).
- España es el país con más esperanza de vida de la Unión Europea (según el informe “State of Health in the EU 2019” de la Comisión Europea).
- España tiene un índice muy por debajo de la media en incidencia de cáncer de todos los países de la OCDE (según el estudio “Health at Glance 2019” de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)
- La producción de ganado y estiércol representan solo el 5,8% de las emisiones (Climate Watch y World Resources Institute, Our Wolrd in Data. Oxford University. 2020).
- La energía, ya sea en forma de electricidad, calor, transporte o procesos industriales, representa la mayoría (el 74%) de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). El sistema alimentario mundial, que abarca la producción y los procesos posteriores a la agricultura, como el procesamiento y la distribución, representa el 26% restante de las emisiones. Y de ese 26%, la ganadería y la pesca representan solo una tercera parte (Joseph Poore y Thomas Nemecek. Science, 2018).
- El 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) procedentes de la ganadería en el mundo provienen de los países en vías de desarrollo (FAO, 2017). No podemos contribuir a mitigar el cambio climático con una visión eurocéntrica.
- La intensidad de las emisiones (CO2 eq/kg de carne) varía entre las diferentes áreas del mundo. En nuestro entorno (Europa del Oeste) tenemos una de las intensidades de emisión más bajas del mundo (FAO, 2017). Nuestros sistemas productivos son más eficientes en el uso de los alimentos, en el manejo y en la sanidad animal. Por eso producimos menos emisiones por unidad de producto final.
- El uso de antibióticos como promotores de crecimiento de los animales de granja está prohibido desde 2006 (Directiva 2001/82/CE y sus posteriores modificaciones). Solo a veces, como ocurre en el caso de los humanos, es necesario tratar a los animales destinados a la producción de alimentos para curar alguna enfermedad bacteriana. El uso responsable de medicamentos garantiza el bienestar de los animales, y que los alimentos que de ellos se derivan sean sanos y seguros.
- La normativa europea regula qué medicamentos y cómo se pueden emplear para tratar a los animales. Así, solo se pueden usar los medicamentos que han sido autorizados tras haber sido sometidos a una evaluación de riesgo con base científica y resultado favorable.
- Así lo ha confirmado también la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) indicando que España redujo un 13,6% las ventas de antibióticos veterinarios en 2019, siendo una reducción del 58,8 % entre 2014 y 2019 (Plan Nacional de Resistencia a Antibióticos).
- A nivel europeo, según el último informe de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) sobre el seguimiento de residuos de medicamentos veterinarios y otras sustancias en animales y productos de origen animal, solo se detectaron un 0,30% de no conformidades en 2019. Así, la EFSA concluye que hay un elevado nivel de cumplimiento y que el sistema de vigilancia europeo es sólido y contribuye a proteger al consumidor.